miércoles, 23 de febrero de 2011

Racionamiento Vs. Aumento de precio

Racionamiento Vs. Aumento de precio

La reducción del consumo de gasolina ayudaría a bajar las emisiones de Gases de Efecto Invernadero principal causa del Calentamiento Global

Marcial Barrios

El presidente de Venezuela Hugo Chávez, planteó el pasado domingo 13 de febrero que se debía reducir el consumo interno de gasolina "para sustituirlo por el gas natural vehicular". Una observación que alarmó a una parte de la población que ha notado la lenta adecuación de las Estaciones de Servicio a la transición de gas natural.

Sin embargo el Ministros Rafael Ramírez aclaró una semana después en su alocución en la Asamblea Nacional la improbabilidad de un racionamiento, pero dejó claro que el Estado subsidia con más de 30 millones de dólares el consumo de dicho combustible.

La pregunta que viene al caso es ¿por cuánto tiempo será posible mantener dichos precios? El tiempo de las decisiones políticas en cuanto al tema de la gasolina ha llegado, es álgido y difícil para quien tenga la decisión en sus manos.

Esta “reducción de combustible” podría ser de gran beneficio para lograr las metas de reducción de Gases de Efecto Invernadero (GEI), importante causa humana del Calentamiento Global y el Cambio Climático, esto obligaría de algún modo al gobierno nacional a implementar políticas ambientales que frenen el descontrol en el consumo de la gasolina. A la vez que implicaría acelerar la implementación de Estaciones de Servicio que aporten el gas natural vehicular.

Cabe destacar que desde hace unos 5 años las compañías fabricantes de autos en Venezuela ya están preparadas para la adecuación que les impuso el Estado al uso de tanques para los vehículos, pero en este caso ha sido el Estado quien ha retardado esta adecuación de las Estaciones de Servicio. El gas natural vehicular fue una política que se implementó a finales de los años 80 por la antigua PDVSA para reducir el consumo de gasolina principalmente en Taxis y vehiculos de transporte, luego fue abandonada con la llegada de la nueva administración política, relanzando la idea años despues timidamente y sin mayor impacto hasta los momentos.

Los ambientalistas esperan que ya sea por el incremento de los precios de la gasolina o por una reducción impuesta por el Estado, este cambio podría ser muy beneficioso para el ambiente y la población. Siempre y cuando se le dé la seguridad y facilidades de transporte público pertinentes a los peatones para que no sientan de una manera negativa este cambio que no puede durar para toda la vida, se ahorraría millones de dólares y a la vez se evitaría la contaminación del planeta.