martes, 22 de febrero de 2011

EL POLO PATRIÓTICO Y EL AMPLIO FRENTE NACIONAL ANTI IMPERIALISTAS


EL POLO PATRIÓTICO Y EL AMPLIO FRENTE NACIONAL ANTI-IMPERIALISTA
Miguel Ángel del Pozo

De acuerdo estamos con el líder de la Revolución Bolivariana, Hugo Rafael Chávez Frías: nada mas “sabroso” que una “confrontación respetuosa, profunda, teórica, práctica, ética y objetiva” en función de realidades reales en tiempos históricos concretos tanto temporales como en proyección en su evolución teórica de ideas más cuando éstas son revolucionarias y socialistas buscando alcanzar la profunda transformación de las estructuras del Estado burgués por un Estado socialista de características nacionales y popular. Discusiones nada fáciles, a veces, vehementes; otras, subjetivas; en ocasiones, utópicas pero en lo humano todo cabe y todo se permita para ir buscando la relación entre la objetividad en análisis y la realidad nacional temporal en evolución.
El título expuesto son las propuestas de dos entes políticos revolucionarios; el primero, el Polo Patriótico, en la voz de Chávez Frías; el segundo, sin negar la objetividad del Polo Patriótico, lo adjetiviza (permítanme la expresión) dándole una explicación amplia a lo interior-teórico del Polo Patriótico cuando considera el proponente, Partido Comunista de Venezuela –PCV-, que sea un amplio frente de carácter nacional y que sustente el anti-imperialismo como uno de los objetivos fundamentales. Cabe la pregunta ¿Se expresan contradicciones en ambas propuestas? así mismo, inquirirnos ¿podríamos considerar la propuesta del PCV como uno de los sub-conjuntos que conforma el conjunto denominado Polo Patriótico?
En tremendo berenjenal nos estamos metiendo pero así son las conversas cuando de intercambio de ideas se trata. De nuevo, vayamos a la Historia pero esta vez nos trasladamos a China en los años 20 del siglo próximo pasado, es decir, por si las derechas no nos entienden, los años 20 del siglo XX. Sorry!. Hemos decidido nuestro traslado en los tiempos históricos porque fue en aquel país de 400 millones de seres humanos para las fechas donde se propuso y se llevó a la práctica la primera experiencia política de frente nacional. Pero ¿de dónde venía esa propuesta político-ideológica? Nos hacemos la pregunta porque es necesario precisar que ha sido una propuesta política sustentada en un análisis marxista muy serio y objetivo aunque con fallas por las faltas de informaciones mas amplias para alcanzar mayor objetividad en sus resultados de aquellas realidades en las que se encontraban las llamadas colonias y semi-colonias aunque este último concepto aún, en aquellos tiempos, no estaba perfectamente definido por las mismas realidades teóricas que venían desde los tiempos del siglo XIX. La propuesta de la conformación de un frente de carácter nacional se comenzó a desarrollar en la 3ra Internacional –Comintern- cuando Vladimir Ilich Lenin y N.V.Roy desarrollaron una discusión teórica sobre el carácter de la Revolución en los países coloniales. Debemos precisar que el proceso de colonización que se impulsó durante el reinado de la Reina Victoria del Reino Unido, práctica y fundamentalmente, fue durante todo el siglo XIX, principalmente, en las regiones del continente africano, en la India y China.
La discusión entre los actores referidos se sustentaba en, evidentemente, el análisis de las realidades cuasi-objetivas que se presentaban en aquellos países del Asia donde la presencia del Imperio británico se había impuesto, es decir, en la India y la China post-manchú. La pregunta fundamental fue ¿cuáles eran las fuerzas sociales que se oponían no solo a la presencia de los colonizadores sino a las consecuencias socio-económicas que esa presencia había desarrollado y sobre los fundamentos legales en los cuáles se había sustentado? En los tiempos referidos se desarrolló una protesta de trabajadores del caucho en Indonesia, colonia holandesa, por las situaciones objetivas de ese sector obrero en la producción de la materia prima del caucho. La protesta fue rápidamente reprimida y su líder, el holandés, Henk Sneevliet, fue expulsado; más tarde fue conocido con el nombre de Maring durante sus conversaciones con Sun Yatsen y el Comité Central del Partido Comunista Chino como representante del Comintern ante aquellas realidades políticas chinas (es necesario resaltar los accionares de los internacionalistas en diferentes procesos revolucionarios en los tiempos contemporáneos). Este importante hecho histórico –los caucheros-, probablemente, les permitió tanto a Lenin como a Roy objetivar las realidades entre la teoría y la práctica ante situaciones coloniales objetivas, es decir, el “obrerismo radical” de los trabajadores del caucho, en si mismo, no reunía las condiciones objetivas como para liderar la revolución en una situación colonial causando, en su praxis, la segura derrota y la desviación probable de sectores obreros hacia propuesta “reformistas” y menos transformadoras, mas acomodadas a “peticiones salariales” y mas adeptas a programas transnacionales por su falta de conciencia revolucionaria.
Ante la no suficiente información sobre las realidades objetivas que se presentaban en un escenario “semi-colonial” como en el que se encontraba China en los años 20, basándose en las cifras de exportación e importación gracias al control de las aduanas nacionales chinas bajo, principalmente, autoridades británicas; conociendo los descontroles del precio del “kerosene” en los puertos del río Yantze que “marcaban” los precios del barril de crudo en las zonas en producción en las “actuales contradicciones” cercanas al golfo Pérsico; cuando China se encontraba bajo un desarrollo capitalista dependiente donde los beneficios no bajaban a la sociedad civil; donde los nacionales chinos denominados como “compradores” se enriquecían gracias a ese concepto del “middleman” en las negociaciones entre “lo extranjero presente” y la sociedad consumista; donde los costos de la “mano de obra” obrera como sector social proveniente del sector campesino rayaban la miseria cuando no la esclavitud; cuando los “pequeños y medianos” productores y comerciantes se veían ahogados tanto por la inflación, la corrupción y la burocracia; cuando los sectores políticos eran “lacayos” de los centros políticos de los Poderes Imperiales e Imperialista; donde el país campesino veía como los terratenientes que, fundamentalmente, vinieran de los sectores sociales de los “compradores”, de los “señores de la guerra”, de capitalistas-financieros que se veían beneficiados de los apoyos de los sectores de las finanzas foráneas, usurpaban sus tierras despojándolos de sus históricas realidades telúricas en propiedad de la tierra; cuando los sectores estudiantiles comenzaban a conocer ese “marxismo” que venía de las tierras denominadas como “Meiguo” –“Tierra de la esperanza, de la riqueza”- en traducciones del inglés al japonés y de éste al chino; cuando se comenzaban a levantar una “camada” de políticos nacionalistas que giraban desde el liberalismo, pasando por aquel socialismo “blanquista”, por imberbes marxistas, por aquel anarquismo que aún no se había definido si su procedencia venía de aquella intelectualidad rusa del siglo XIX y/o era “producto nacional”. Era una complicada realidad cuando la propuesta política era el anti-imperialismo, el nacionalismo, el anti-feudalismo en un escenario de capitalismo naciente.
Ante ese marco referencial arriba descrito, la Internacional Comunista –Comintern-, percibió a las colonias y semi-colonias como los “talón de Aquiles” de aquellos imperialismos en permanente expansión religiosa-militar y económica con importante presencia de los sectores políticos buscando trasladar no solo los paradigmas de ese “capitalismo en las colonias” sino sustentando su legalidad en Acuerdos y Tratados que Mao Zedong los calificó como “Desiguales”. Al tiempo, el capitalismo tanto los nacionales como los internacionales se encontraban a las puertas de “su crisis” más importante desde su consolidación como el “modelo económico y político” del futuro promisor de la Humanidad. Ante aquellas realidades y análisis de las realidades chinas, el Comintern propuso e impuso el llamado Frente Nacional Unido que impulsaría las políticas nacionalistas, anti-imperialistas y anti-feudales; para ello logró acuerdos con los sectores políticos y económicos nacionalistas chinos y sectores de los incipientes partidos políticos chinos como eran el Guomindang y el Partido Comunista Chino localizando sus praxis revolucionarias en el sur de China. El cuerpo social revolucionario estaba compuesto por los sectores sociales referidos más un sector militar en reorganización, preparación en las teorías y formaciones militares, y en la preparación de cuadros de ambos partidos en mención. No vamos a entrar en el desarrollo político-militar del Frente pero si nos vamos a preguntar ¿Por qué fracasó?
Es evidente que todo fracaso político se sustenta en las contradicciones internas que se desarrollan durante el proceso revolucionario que se propone alcanzar políticas que, obviamente, se le oponen aquellos factores que son y seguirán siendo desfavorecidos por aquel proceso revolucionario en desarrollo. El Frente Unido Nacional chino fracasó por una serie de contradicciones que se presentaron en los diferentes sub-conjuntos que lo conformaban sobre la base de la inconsistencia ideológica que lograse unificar las diferentes “formas de pensar” de los diferentes grupos ideológicos tanto a nivel de las interioridades de los partidos políticos mencionados, los sectores militares que conformaban las fuerzas armadas nacionalistas adscritas al proceso revolucionario, a las contradicciones de clase de los sectores capitalistas-nacionalistas, las burguesías nacionalistas, las pequeñas burguesías que buscaban las soluciones de sus angustias en tiempos irreales, las clases obreras divididas por tendencias anarquistas, obreristas, socialistas-radicales, por mención, y los sectores del lumpen-proletariat que despertaron en conciencia buscando revanchas en actitudes violentas que se confundieron con las aspiraciones de los “ejércitos populares” terminando minando las posibilidades reales de liberación revolucionaria. Las conclusiones de aquel primer frente nacional que se conformó desde 1924 hasta marzo-abril del 1927 sirvió de base teórico-práctica para posteriores praxis en otras latitudes incluyendo China en años posteriores cuando el Frente Anti-japonés Nacionalista y las propuestas de frente previos a la Guerra Civil. En nuestras latitudes hay ejemplos históricos a estudiar.
La propuesta de Chávez Frías de conformar “el Polo Patriótico”, consideramos, va más allá de lo conceptual-pragmático de la propuesta de un frente como tal aunque, aparentemente, los sub-conjuntos que pudieran conformar el Polo Patriótico pudieran tener casi los mismos sino un mayor número de componentes que el estrictamente referido como Frente Nacional. Pareciera, en principio, que el Polo Patriótico pudiera ser, en lo político, social, económico e ideológico, de mayor amplitud donde las contradicciones de clase-ideológicas pudieran ser mas “intensas y dramáticas” como, por ejemplo, se pudiera presentar con una protesta de juventudes revolucionarias como la que se expresó en “La Estancia” cuando colectivos solicitaron un diálogo para discutir “normas y reglamentos” que rigen el funcionamiento de ese lugar de esparcimiento, particularmente, para niños y niñas y personas de la tercera edad sin descontar las frecuentes ocasiones cuando y donde las juventudes sin distingo ideológico disfrutan de sus ambientes lógicos. Podríamos referirnos, al tiempo, a los accionares de una serie de jóvenes que han decidido protestar por supuestas situaciones de carácter legal sin los conocimientos objetivos que sustentan sus protestas pero que responden a expresiones ideológicas de carácter capitalista ante supuestas políticas que dichos estudiantes, directa o por mampuesto, califican como de comunistas, dictatoriales, violación de los Derechos Humanos de la “otredad”, la no libertad de prensa, y algunas otras “realidades”. Nos referimos a ambos ejemplos para calificar la praxis de la Revolución cuando entra a funcionar lo que podríamos calificar como las “políticas del Polo” siendo esta praxis de “profunda amplitud” con respeto “al otro”; mientras que podemos referirnos a las actitudes de aquellos jóvenes capitalistas, probablemente, desde las derechas mas radicales pasando por las tendencias democristianas y terminar en las socialdemócratas a pesar de que el Gobierno los “visualizó” cuando el Ministro para los Asuntos de las Políticas Internas y Judiciales se apersonó, para su comprensión y entendimiento, sosteniendo conversaciones de respeto en el marco de las políticas que definen el carácter del Polo Patriótico y contenidas en la Constitución Bolivariana; aún así y a pesar de esa franca y honesta actitud del Ministro Tarek, los estudiantes de la oposición mantuvieron y mantienen sus decisiones de continuar con sus accionares de presión para que “lo nacional” sea mancillado, sea humillado buscando socavar, objetivamente, con sus actitudes y solicitudes, la dignidad nacional como cuando se expresaba, esa humillación, durante los últimos estertores de la 4ta República gracias a sus políticas de “invisualizar” a las sociedades no favorecidas. Nos obligamos a precisar que una de las virtudes humanas a practicar es la del “patriotismo” que, quizás, algún que otro miembro de la Curia venezolana haya olvidado.
En esos escenarios, actuales y futuros, el Polo Patriótico debe sostener actitudes de solidez ideológica para confrontar las actitudes en realidades ideológicas capitalistas de los factores de oposición manteniendo el discurso centrado en esa confrontación ideológica al tiempo que, públicamente, las responsabilidades de la estructura del Estado en transición del burgués al socialista deberían esclarecer las mentalidades de toda la sociedad venezolana e internacional sin distingo de clases, ideologías, nacionalidades y religiones en los contenidos que sustentan los idearios que los estudiantes en “huelga de hambre” manifiestan como violatorios de los Derechos Humanos del “ser social” venezolano.

delpozo14@gmail.com