Por: Juan Barreto Cipriani
El rico pensamiento político por el que nos conduce nuestro Camarada eterno Chávez,
nos permite experimentar nuevas formas de organización y de politización que se
adapten a los tiempos que vivimos. La conformación de un movimiento de
movimientos, guiado por causas y espacios comunes de trabajo y discusión
colectiva, hará posible avanzar en la creación de una red del poder popular que
soporte el modelo de comunidad solidaria, base para la construcción del Socialismo
del Siglo XXI.
La
multitud organizada en red, en nodos colectivos de demandas y necesidades,
garantiza el ejercicio de una democracia participativa y protagónica que
conserva, además, los valores de la diversidad, la pluralidad y la singularidad
de los individuos y las culturas. Más que nunca, este proceso político que
protagonizamos, es el devenir inmediato de estos 14 años de lucha de la mano
del huracán Chávez, en la búsqueda de la dignidad y de la justicia. La red del
poder popular va siendo el espacio que convoca a la imaginación, la creatividad
y la iniciativa de todas las voluntades de nuestro pueblo. Estamos resteados
con esta idea y no abandonaremos nunca el compromiso en torno a la construcción
de una sociedad equitativa, como él nos enseñó.
Toda
revolución es un enorme desafío que obliga a cambiar paradigmas, sacudir
esquemas y cuestionar todas las estructuras existentes. El proceso
revolucionario es un tremendo reto porque además tiene que tomar en cuenta
errores cometidos en el pasado histórico de lo que se llamó “el socialismo realmente existente”, y
reinventar la tradición de las luchas sociales con la finalidad de vencer
definitivamente el egoísmo, el individualismo y los intereses de los poderosos.
Este es el espíritu que nos impulsa a construir el socialismo del siglo XXI, y
que conlleva una doble manera de pensar nuestra acción: inventar y transformar
las formas de convivencia y comunidad que sean sustentables y duraderas en el
tiempo, caracterizadas por los valores de igualdad, cooperación y solidaridad.
Este
es tu legado y nuestro mayor compromiso contigo, camarada y comandante Chávez.
Juan Barreto Cipriani