Cadena Global/EFE Senadora Córdoba analiza demandar a Uribe Miércoles 13 de agosto de 20087:22 PM La senadora opositora colombiana Piedad Córdoba, ex mediadora en la liberación de rehenes de las FARC, anunció hoy que analiza demandar por injuria y calumnia al presidente de su país Colombia, Álvaro Uribe. Esto, por acusarla de manipular testigos. "El presidente (Uribe) está buscando o que me maten o que me yo me tenga que ir del país y del país no me voy a ir. La responsabilidad sobre mi seguridad y sobre mi vida le corresponde al presidente", expresó Córdoba.
Estas afirmaciones las hizo la congresista del Partido Liberal en la ciudad petrolera de Barrancabermeja (noreste), tras asistir a una audiencia con víctimas de grupos paramilitares de derecha, divulgó su despacho. Uribe insinuó el lunes pasado que Córdoba debería ser investigada, al igual que el senador Gustavo Petro, de la coalición socialista Polo Democrático, por supuesta manipulación de testigos en denuncias sobre presuntos nexos de políticos afines al mandatario y paramilitares. Estos supuestos nexos desataron a finales del 2006 el escándalo de la "parapolítica", por el que están detenidos mas de treinta congresistas de partidos que respaldan a Uribe. "Yo puedo ser una persona que no piense como piensa el presidente, pero soy una persona decente, éticamente respetable, incapaz de hacer ese tipo de manipulaciones que irían en contra no solamente de la verdad, sino también de personas que podrían tener consecuencias muy graves para sus vidas", sostuvo Córdoba. La senadora y el mandatario venezolano, Hugo Chávez, realizaron una labor de mediación el año pasado para intentar la liberación de rehenes de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Sin embargo, Uribe canceló en noviembre pasado la mediación al enterarse de que Córdoba había llamado a militares colombianos y los había puesto en comunicación con Chávez. Con todo, las gestiones lograron en enero y febrero pasados que las FARC liberaran como gesto unilateral a seis políticos colombianos que llevaban alrededor de seis años secuestrados. Córdoba fue acusada hace dos meses en el Senado de desacreditar al país en el exterior y de ausentarse con frecuencia, por lo que sus colegas le pidieron explicaciones sobre quién costeó algunos de sus viajes al extranjero. La legisladora estuvo secuestrada varios días en mayo de 1999 por paramilitares de derecha y en 2006 uno de sus asesores, el catedrático y activista Jaime Enrique Gómez, apareció muerto en las montañas de Bogotá.
