Ayer murió, vilmente asesinado, Javier Gutierrez

Fuente: http://www.aporrea.org/ddhh/n134846.html

Ayer murió, vilmente asesinado, Javier Gutierrez, otro militante del PSUV, abatido por arma de fuego frente a la Coca-Cola de Los Cortijos, Municipio Sucre del Estado Miranda (Área Metropolitana de Caracas), con el supuesto móvil de atraco para quitarle la moto.

Hasta el momento no se tiene la versión oficial de las experticias, pero personas afectadas divulgaron que, supuestamente, un par de jóvenes con uniforme estudiantil, le dispararon para quitarle su motocicleta, hecho del que habría quedado un registro fílmico.

Gutiérrez era comisionado del batallón Terrazas de La Vega, en la populosa parroquia del mismo nombre. Tenía unos 40 años de edad y deja esposa y tres hijos. Es recordado como persona de comportamiento ejemplar, buen compañero, amigo y militante, buen padre y responsable por su familia.

Sus restos fueron velados en la Funeraria La Fuente, próxima a la Iglesia La Coromoto, Urbanización El Pinar, El Paraíso. El sepelio fue anunciado para hoy a la 1:00 PM.

Hace menos de 15 días fue asesinado otro militante del PSUV en Caricuao, cuando se encontraba participando en la jornada de inscripciones del partido.

La ocurrencia de un nuevo asesinato contra un militante activo del PSUV, el mismo día de la marcha política de la oposición, promovida con consignas de reclamo por el presupuesto universitario y el tema de Globovisión, vuelve a encender algunas alarmas e interrogantes, ya que hay quienes empiezan a sospechar de la posible actuación de la delincuencia común como cobertura para el sicariato, al servicio de planes conspirativos de corte contrarrevolucionario.

La militancia del PSUV está a la espera del resultado de las averiguaciones sobre los casos que han venido sucediendo, para disponer las acciones pertinente en preservación de la integridad de los militantes de la organización.

En acompañamiento al fallecido y a sus deudos, elevan su voz gritando: ¡Hasta el socialismo siempre! ¡Patria, socialismo o muerte, camarada Jorge Gutierrez!

Hasta Siempre Javier Gutierrez los que mueren por la vida no pueden llamarse muertos

http://www.aporrea.org/ddhh/a78240.html

(Javier Esteban Gutierrez Camejo ahora que estas con ALI, cuéntale que Ruperto ya no bajará del cerro con su carajito enfermo para que le den el peinillazo mansalvero, sino que lo hará con su gente a defender la Revolución, cantando el Himno Nacional, y armado con la Constitución.)

Los que conocimos a Javier sabemos de su inquebrantable espíritu de solidaridad, entrega y compromiso, sabíamos de su desprendimiento a lo material de la ayuda al prójimo, de la sonriza eterna, hoy cuando una bala asesina, nos quita de la trinchera al camarada, seguros estamos que donde sea que este Javier, no podrá llamarse muerto, vivió trabajando y murió trabajando, y vivió para los demás, hoy nos solidarisamos con Sonia, con Kevin y sus dos otros hijos y decimos que su partida nos obliga a levantar con mas fuerza la bandera de la igualdad, la lucha continua para hacer de este pueblo un pueblo de iguales, solo pedimos a las autoridades que cambien de estrategia ante los cobardes que escudándose en un arma día a día nos arrebatan a tantos venezolanos valiosos y cambien la estrategia ante el flagelo de la delincuencia que día a día nos arrebata a los hijos de Bolívar, desde el Bloque Popular de la Vega le extendemos a toda nuestra familia vegueña nuestra solidaridad, y nuestro compromiso en no defraudar esos años que Javier como revolucionario sembró en nuestras conciencias, el mejor tributo es no bajar la guardia y como lo diría el Pana Ali, los que mueren por la vida no pueden llamarse muertos y la siembra de Javier el día de hoy, florece en miles de Javier (Macho), regados en todo nuestro país, a su Batallón del Psuv Terrazas de la Vega, donde era su Comisionado de Propaganda valla también nuestro apoyo inquebrantable

Decidí descontar mi rabia descansando sobre mis principios, cuando apareció tu imagen de guerrillero vivo y hoy tragándome la melancolía recuerdo que dijiste.

Visionario silencioso en décadas ponte de pie nuevamente Nuestro momento está en crepúsculo.

Subversivo dormido, debes tomar el camino por el que en Tus sueños transitasteis.

Armaté de valor y lealtad con los ideales que te fraguaron Los acontecimientos, los libros y tus sentidos.

Despídete de los tuyos y ve nuevamente al camino que pensar en la victoria te consolara.

Arrebata la lanza como cacique, y con su punta inicia el combate que arrease con ferocidad al ofendor.

Y si un compañero deja de sonreír, para entregarse a la tierra y su pecho queda arropado con el inferior de nuestra bandera, deja que la lluvia limpie su piel y en su recuerdo se obediente en la lucha hasta TRIUNFAR.

CARTA ABIERTA AL “DIARIO DEL PUEBLO”

Autor Ildegar Gil
ildegargil@yahoo.com
Periodista

“Cuando el hombre muerde al perro” fue la máxima, sencilla pero muy práctica, que sirvió -y sirve aún, tal vez- para levantar en generaciones y generaciones de periodistas la noción del concepto de noticia. En ocasiones -tanto en Venezuela como en cualquier parte del mundo- los hechos son tan confusos, que apelar a esta vieja conseja resulta de gran utilidad para ubicar con casi certera precisión el punto de partida de nuestro trabajo como comunicadores. Lamentablemente el sesgo político, la hora de entrega de las cuartillas, la experiencia o inexperiencia del fablistán y hasta el estado de ánimo que ese día acompañaba nuestra andanza reporteril nos hace olvidar tan valiosa y sabia fórmula del dentellear.
Nos atrevemos a compartir con usted esta reflexión, porque Últimas Noticias no logró -o no quiso- zafarse del estilo usado por otras empresas que lícitamente explotan el fenómeno comunicacional al momento de cubrir el desenlace que tuvo la marcha protagonizada por quienes adversan a la Revolución Bolivariana (las mayúsculas no son casuales).
“Marcha opositora fue dispersada a punta de lacrimógenas” y “Gas lacrimógeno dispersó a opositores en un santiamén”, fueron titulares de la edición del 02.05.09 que aunque captaron una situación que efectivamente sucedió no puntualizan exactamente lo que dio origen a la reacción por parte de los cuerpos policiales. Es decir, así las cosas aún los dientes del hombre no han perforado la piel del can porque como es fácil detectar, tal situación sólo se produce cuando en un alejado y distante cuarto párrafo de la nota firmada por Marco Ruiz en la página 10, leemos: “La chispa se prendió cerca de la 1:30 pm. El grueso de los machistas todavía oía a los distintos oradores, cuando unos pocos intentaron pasar el cordón policial y avanzar hacia Parque Carabobo”. ¡Esta, amigos y amigas, es la noticia!
Sí, he allí el asunto. Justo acá el hombre muerde al perro porque hubo “unos pocos” que amagaron con violar las normas previamente establecidas por las autoridades municipales. Tal vez esté errado, pero siento que aún en nuestro país y en el orbe entero las disposiciones son para acatarlas mientras que su incumplimiento aparte de constituir un hecho informativo, merece la intervención oficial obligada a restituirlas. O sea, la noticia es la desobediencia a la ley y no la aplicación de la misma en el caso que nos ocupa.
Quien desprevenidamente se haya topado con el enfoque dado por Últimas Noticias y otras empresas a este escenario, creerá en consecuencia que en la República Bolivariana de Venezuela la represión, el atropello y la violación a los derechos humanos es la norma. Asimismo, también dejará de saber que “unos pocos” y muchos otros no cesan en su propósito de poner fin -usando mecanismos nada pacíficos- al proceso socialista que la mayor parte del pueblo decidió darse.
Es público y notorio que Últimas Noticias ha invertido en los años recientes, grandes esfuerzos en pro de presentarnos un producto cada vez mejor. Justo es reconocer que el objetivo se ha logrado en muy buena medida. Esperamos sus usuarias y usuarios que renglones como el que nos ocupa hoy, también den un paso adelante en función de llamar a las cosas por su nombre. Así, cada día sumaremos en procura de conquistar una sociedad más y más transparente. Ello, indiscutiblemente, nos favorece a todos.